-UN HUMILDE LLAMAMIENTO A LA CORDURA DENTRO DEL SECTOR DE LOS VIDEOJUEGOS (Y FUERA DE ÉL)-
“Es que eres descaradísimo Pepino, se te ve de lejos lo que intentas hacer. Ahora buscas un tema polémico para ganar visitas a tu web cutre a costa de generar salseo en las redes. Vaya un crápula y un buitre que eres”. No te culpo por vislumbrar este concepto si es algo así lo que has pensado al visionar esta entrada del blog, pero me temo que una vez más has meado fuera del tiesto. No es generar polémica lo que busco, al contrario, si no que todos reflexionemos un poco sobre el tema que te quiero exponer a continuación, algo que creo que es muy necesario.
La idea para escribir estas líneas se me ocurrió cuando hace poco comencé a jugar a Kingdom Come: Deliverance, un juego de rol de acción desarrollado en 2018 por una pequeña empresa de videojuegos de la República Checa llamada Warhorse Studios.
Al poco de comenzar a disfrutar de este juego, me di cuenta de que el nombre de este videojuego me sonaba de algo. Pasados unos minutos, por fin recordé la razón.
Haré un resumen rápido de lo que sucedió para quien no conozca la historia. En 2018, tras haber lanzado el juego, su creador Daniel Vávra, fue invitado a asistir al Gamelab de Barcelona, una de las ferias de videojuegos más importantes de nuestro país, para que hablase acerca del desarrollo de su juego, uno de los proyectos europeos más interesantes de ese año. Era una magnífica oportunidad para conocer más acerca de este título y de las ideas creativas de un estudio como Warhorse.
Sin embargo, Vávra canceló su charla en el Gamelab tras recibir una serie de insultos en redes sociales por parte de una periodista española de videojuegos que lo calificaban como nazi (entre otros adjetivos) y lo animaban a no venir a nuestro país. El señor Vávra respondió furibundo a dichas acusaciones informando de que él tiene herencia judía y que de hecho su abuelo escapó de un campo de concentración nazi, por lo que sus afirmaciones eran como poco muy desatinadas.
I have a Jewish heritage, my granfather escaped nazi forced labour camp, most of my partners family died in concentration camp and you call me a Nazi? Quite a bold statement. pic.twitter.com/NcbPvVOY37
— Daniel Vávra (@DanielVavra) May 17, 2018
“Manolete, si no sabes torear pa qué te metes”. Descripción gráfica.
La polémica incendió las redes sociales, y se montó un buen jaleo, como te puedes imaginar. Sea como fuere, lo que se consiguió con esto fue que al final perdiésemos esta gran oportunidad de traer a nuestro país a un experimentado y reconocido desarrollador de videojuegos, así que la conclusión fue que todos salimos perdiendo.
¿Por qué ocurrió esto? por, como ha ocurrido otras veces a lo largo de la historia de la industria videojueguil, por tratar de politizar todo lo que la rodea. Y es que la política en numerosas ocasiones solo sirve para generar enfrentamientos y para ensuciar todo aquello que toca, por desgracia. Es como la mano de Midas inversa.
“Pero bueno Pepino, ¿qué motivos tenía esa periodista para llamar nazi a Daniel Vávra?” te preguntas ahora con esa sagacidad que te caracteriza. Pues Laura Gómez, más conocida en el mundillo como AzulCorrosivo, hacía tal polémica calificación principalmente porque según ella, el mundo que presentaba Kingdom Come: Deliverance no tenía diversidad racial y no había protagonismo suficiente para las mujeres.
El caso es que este videojuego nos sitúa en la región de Bohemia, en pleno corazón de Europa, en el siglo XV. Como es bien sabido, en aquel lugar y momento histórico la presencia de personas de color era algo muy fuera de lo común, igual que el respeto a los derechos de las mujeres, y así lo hizo saber la cabeza visible de Warhorse Studios, que pretendía desde el primer momento hacer un videojuego con una recreación lo más fidedigna posible de la vida en la Edad Media y así lo hizo, contando incluso con la ayuda de historiadores que le ayudasen a crear un juego totalmente fiel a la realidad histórica. Aun así, en este juego se incluyen varias mujeres que rompen con los cánones de la época y que son muy importantes para la trama, como Lady Stephanie de Talmberg o Theresa.
Lo cierto es que Kingdom Come: Deliverance plasma realmente bien la sociedad de entonces: el lenguaje, las costumbres, la religión, etcétera. Lady Stephanie me resultó un personaje de lo más interesante.
Cuando yo comencé a jugarlo, Kindom Come: Deliverance me resultó un muy buen juego. Viene a ser lo más parecido a un simulador de la vida medieval muy completo. Ofrece un mundo muy grande cargado de detalles y de opciones para el jugador. Había leído en el pasado artículos y noticias sobre la polémica que se desató, pero fue hace varios años y no lo recordaba en un principio, y puedo afirmar que durante mi partida no vi absolutamente ningún motivo para despotricar de este título por cuestiones de diversidad de género o racial.
Éste es un videojuego muy recomendable, realista hasta el extremo y ofrece una barbaridad de horas de juego. Por eso mismo es una lástima que un videojuego tan bueno como éste se vea en cierta forma “mancillado” por este tipo de sucesos que nada tienen que ver con los videojuegos.
Otro aspecto del que cabría hablar es de los graficazos de los que hace gala Kingdom Come: Deliverance, pero ése es otro tema aparte.
Volviendo a Vávra, Cierto es que mostró mucho apoyo público al fenómeno conocido como Gamergate, un movimiento que surgió en un principio para combatir la falta de ética periodística en la prensa especializada de videojuegos, así como la censura, pánico moral y constante correción política que afecta al sector en ocasiones, pero que acabó derivando en una campaña de ciberacoso contra mujeres de la industria bien conocidas por ser abiertamente feministas.
De esta forma, sería entendible que algunos sectores de la comunidad de videojuegos estén en contra de las ideas de este señor, pero aún así me pregunto: ¿acaso no es posible separar la obra del autor? Si este desarrollador viene a hablar de su juego y no de sus ideas políticas, ¿por qué se considera que debe ser persona non grata a un evento de videojuegos? ¿acaso nos estamos todos volviendo un poco locos?
Incluso voy más allá, pongamos que realmente este señor viene a hacer un mitin político. ¿No sería más sano para todos y más sensato debatir con él en lugar de silenciarle? aunque igual es que yo soy muy ingenuo y pienso que hablando se entiende la gente.
Si seguimos por esta vía de la “cultura de la cancelación” que tan de moda está ahora, acabaremos por prohibir que las personas que piensen distinto a nosotros desarrollen videojuegos, compongan música, rueden películas o escriban libros.
– “Mira estos cómics tan divertidos que he encontrado”. – “Tío, sabes que están hechos por un facha, ¿verdad?”
¿Se supone que ahora debo yo sentirme culpable por disfrutar con Kingdom Come: Deliverance? ¿soy peor persona por ello? ¿Debo investigar acerca de los creadores antes de probar un videojuego para así poder jugar con la conciencia tranquila?
¿O puedo simplemente seguir disfrutando de mi pasión, que son los videojuegos, sin importar lo que opinen un puñado de personas en internet y sin juzgar a nadie ni ser juzgado?
Miro a mi alrededor y cada vez veo como la sociedad vive cada vez más fragmentada. Incluso estando completamente rodeado de gente, uno puede estar absolutamente solo. Y precisamente una de las vías de escape de aquellas personas más solitarias siempre fueron los videojuegos. Ellos te transportaban a un viaje alucinante de aventuras y experiencias únicas… pero con la deriva actual del conjunto de la sociedad ahora también parece que se quiera dinamitar desde dentro este refugio de paz y diversión que son los videojuegos.
Ayer hablamos con @DayoScript sobre la alt-right gamer y cómo podemos cambiar la comunidad del videojuego.
Programa completo en https://t.co/uhUq826Nua @cuellilargo pic.twitter.com/J8NrdcO5p9
— Blissy (@blissy) October 29, 2021
¿Alguien me explica por qué se está hablando aquí de bandos, de identidades y de activismo? ¿por qué se habla de “gamers” como si fueran un colectivo totalmente homogéneo en el que todos piensan igual? Yo diría que aquí se está hablando de todo menos de videojuegos, o a lo mejor es que estoy yo muy loco.
Creo que no hace falta ni que lo diga, pero por descontado, estoy absolutamente en contra de ciertas actitudes que se pueden ver por ahí, como vejar a alguien que es homosexual, o acosar mujeres a través de juegos online. La cuestión es, ¿qué tiene eso que ver con los videojuegos? ¿no será que tiene que ver más bien con cómo es cada persona y la educación que le han dado? ¿acaso con ciertos discursos pretenden colectivizarnos a todos aquellos que disfrutamos de los videojuegos como si fuésemos una mente colmena, despojándonos así de nuestro individualismo y personalidad?
Yo lo siento, pero me planto y digo NO a todo esto. No quiero discutir sobre política. No quiero ganar discusiones en internet, ni aleccionar a nadie en base a mis principios morales.
Si alguien quiere que juguemos juntos a un videojuego, siempre estaré encantado de compartir una partida y siempre trataré de que lo pasemos genial juntos, porque al fin y al cabo ése es el fin último del videojuego. Y si alguien piensa que un juego es peor o mejor por la razón que sea, con gusto me sentaré con esa persona a debatir sobre ello, discutiendo de forma sana, cordial y amistosa acerca de su apartado gráfico, su trama, sus mecánicas jugables, su banda sonora, las sensaciones que me despierta o la experiencia de juego que me ofrece. Pero lo que no voy a hacer es sentarme a hablar de videojuegos y hablar de bandos, de derechas, de izquierdas, de ideologías…
Por favor, basta de hablar de buenos y malos, basta de querer enfrentar a la gente por cualquier cosa.
Yo solo quiero jugar a videojuegos.
14 comentarios
¡Genial entrada! Suscribo letra a letra todo lo que dices. Aborrezco todo este panfletarismo moderno que lo único que busca es desvirtuar la finalidad de algunos medios, como los videojuegos, así como crear disidencias y escisiones dentro de la comunidad de usuarios. Pero no nos engañemos, el germen de todos estos debates absurdos de “Kingdom Come es machista y de derechas” o “TLOU 2 es propaganda LGTB y de izquierdas” no es otro que el circo de las redes sociales y el querer ganar viralidad, interacciones y seguidores al tratar temas socialmente sensibles y polémicos. Mamarrachadas todo puesto que el verdadero activismo se ejerce con una pancarta a pie de calle, mediante donaciones económicas o colaborando activamente en plataformas por los derechos, entre otras, no poniendo tuits diciendo que todo me ofende, que un simulador de la Edad Media no es inclusivo o que en un equipo desarrollador de videojuegos no hay paridad de hombres y mujeres solo para buscar la viralidad.
No digo que los videojuegos no puedan contener un mensaje político, decisión de su equipo desarrollador, o que no haya que perseguir la lacra del acoso de mujeres en los videojuegos en línea, pero hay que tener los pies en la tierra y no buscarle los tres pies al gato ni inventar connotaciones políticas para algo, como lo son la mayoría de los videojuegos, que no suele tener ninguna intencionalidad política y que la inmensa mayoría de los mortales consideran un simple divertimento.
Y no me enrollo ni me enredo más porque me caliento. Insisto en la calidad de la entrada y en darte de nuevo mi enhorabuena. La única pega que le encuentro es que has ascendido a la categoría de “periodista” a algunos sujetos que bueno, simplemente decir que ya les gustaría. Por lo demás mis dieses ¡Un saludo!
Pues no me queda otra que ponerme de pie y aplaudirte MUY FUERTE porque estoy 100% de acuerdo contigo, y lo has expresado de forma meridianamente clara. Chapó.
Me dejáis comentarios tan currados que dejan en pañales al propio artículo, cagonlavirgen ??
Sobre lo de AzulCorrosivo, no se me ocurría como definirla sin sonar irrespetuoso… Y bueno, hasta donde yo sé ha escrito para medios importantes. Pero vaya, que ahí también llevas tú parte de razón ?
Un honor tenerte por aquí leyéndome y comentando, ¡Muchísimas gracias Arald!
Ante todo, permíteme que me ponga serio por un momento y déjame felicitarte por escribir de forma tan amena pero clara acerca de un tema que nos afecta (queramos o no) a todos aquellos que disfrutamos de esta noble y bella afición que son los videojuegos. Creo que has demostrado ser muy valiente porque es un tema espinoso, pero también has sido tremendamente respetuoso y humano en tu discurso al respecto del tema. Me quito el sombrero ante ti chavalote, y te doy mi más sincera enhorabuena por poner en palabras lo que muchos pensamos.
Si ya es triste que desde fuera se produzcan (y produjeran) tantos intentos por tratar de politizar los videojuegos y utilizarlos fuera de su contexto como herramienta política o reducir la presentación de algunos títulos a un término absurdo y totalitario con tal de dar peso a un argumento sin base alguna, más triste es todavía que desde dentro del mundillo se alcen ciertas voces que pretendan hacer lo mismo, contaminando el medio.
Si, he dicho contaminando. Porque no cabe duda de que todo tema que acaba siendo parte de un discurso político o de ciertas ideologías, acaba “enmierdado”. Porque la política no es más que eso, una mierda que contagia con su suciedad a todo cuanto toca, y a veces, hasta cosas que caen por su propio peso.
En fin, no me quiero enrollar más, pero creo que has puesto un tema de lo más interesante sobre la mesa y sobre el que me gustaría tener la oportunidad de comentarlo mas extensamente por la necesidad de hacerlo, y por lo interesante del debate que pudiera salir.
Un abrazo bien grande y mi más sincero respeto por tu post.
Y mi más respeto por tu persona, ser de luz.
Muchas gracias por escribirme lo que piensas, me alivia ver que no estoy solo. Y es que a veces parece que todo el mundo está desquiciado y que está deseando que estalle una guerra civil o algo. Que se relajen todos ya, hombre. Y a hablar de política al congreso, no aquí.
¡Un besote!
Para ser honesto. Twitter me comenzó a aburrir porque anda plagado de “expertos” que usan los videojuegos para hacer su proselitismo político.
Qué hay juegos con contenido politico? Si los hay, pero el problema va cuando usan el mensaje y lo modifican a conveniencia para dar por culo y satanizar a todo el que no piense igual. Prácticamente la gente se ha convertido en lo que juran erradicar y en el camino manchan a una afición con mucho potencial a la hora de unir a las personas.
Un saludo muchacho y espero que estemos en contacto en algún momento!!!
Exacto, a veces me siento como si estuviésemos en la época de la Inquisición, o cuando la peña se acusaba de brujería a lo loco. Parece que hay unas ganas tremendas de señalar a aquél que piense distinto a nosotros y de demostrar superioridad moral a toda costa. Pues yo digo que NO utilicen los videojuegos para eso, porque aunque hay videojuegos con contenido político, no son una herramienta para tu propaganda. Son una forma de arte, un divertimento, y para muchos una pasión y una forma de vida.
Que se vayan a dar por culo a otra parte.
Gracias Gendou, un placer tenerte por aquí, un abrazo.
Muy interesante, si señor. Y muy de acuerdo en lo que dices. Politizar algo siempre acaba mal, sobretodo cuando lo que busca es hacer ruido más que aportar y mejorar las cosas.
Yo sí estoy a favor de la inclusión, y el respeto en todos los ámbitos, también el de los videojuegos, pero siempre desde una perspectiva racional, y no desde el extremismo.
Gran artículo, si señor.
Exacto, como decía Aristóteles, en el punto medio está la virtud. Los extremismos nunca llevan a nada bueno. Y por desgracia, la sociedad cada ves es más extremista para todo… una lástima.
¡Gracias por comentar, un saludote!
La maldita política estropea todo lo que salpica en vez de ayudar o normalizar situaciones. Muchas veces quieren mezclar juegos con carácter histórico con un prisma político actual y eso lo único que consigue es que chirrian y acaben en algún cajón de los desastres. Me encantaría ver juegos con personajes históricos reales en vez de personajes metidos con calzador.
Pues sí. Se empeñan en trastocar y transformar todo y cuando el producto en cuestión se lleva la hostia en ventas le echan la culpa al racismo, a la xenofobia, al heteropatriarcado, al machismo o a yo que sé cuántas cosas más. ¿Te has parado a pensar que quizás tu producto es una ponzoña?
En fin, que no hay más ciego que el que no quiere ver. Gracias Javocho.
¡Se puede decir más alto pero no más claro! Las cosas deberían ser tal cual son y no mezclarse para crear polémicas y discusiones que llevan a muchísimos malentendidos. Pero como bien decís en los comentarios anteriores a día de hoy todo se basa en eso, llegando incluso a terrenos como el deporte (por temas de estos el fútbol por ejemplo cada vez nos gusta menos) y a los videojuegos, cosa que no nos gusta nada pues nadie quiere que su mayor hobby se desvirtue.
Deberías de poner la última frase en mayúsculas, compañero, ya que todo sería más fácil y bonito si disfrutásemos cada uno de lo que nos gusta sin entrar al trapo por temas que no vienen al cuento con cualquier afición que se precie.
Un abrazote,Pepino y nos leemos en el siguiente post sin falta!!!
Pues sí, creo que la última frase define lo que todos pensamos. Que no me bombardeen la cabeza con ideologías, activismos, politiqueo, derechas e izquierdas, fascismo, comunismo… ¡que me dejéis jugar tranquilo, cojones ya!
Como bien dices, en el fútbol pasa lo mismo. Hay varios equipos en España que están politizados hasta la médula, y me da un asco tremendo.
Muchas gracias por tu comentario, chef, ¡un abrazo gordo!
Hoy en día todo está politizado: el trabajo, las relaciones sociales, la ciencia, el deporte, el cine, la música, la televisión y, por supuesto, los videojuegos. Y todo por tratar de imponer una ideología a aquellos que ven el mundo de una manera distinta, pero no por ello peor. Es muy triste todo lo que está sucediendo, si bien a mí me da que ha ocurrido siempre, solo que gracias a Internet no solo los de un lado del planeta conocemos lo que pasa en el otro sino que la visibilidad de ambos ha hecho que el fenómeno se magnifique a extremos que nadie podía imaginar años atrás cuando el enojo, discusión o pelea quedaba reducido al ámbito local, al círculo próximo.
Es muy difícil luchar contra esto pese a que los que evitamos relacionar una cosa con la otra somos muchos, pero hacen más ruido quienes sí lo hacen y son los que se llevan toda la atención, para bien y para mal, y la periodista que has mencionado es un claro ejemplo. Como siempre, un excelente artículo Empepinao. Saludos.
Como se suele decir, tontos ha habido siempre, pero ahora con Internet tienen un altavoz que resuena en todo el mundo. Y el verdadero problema no es que haya un tonto o un politicastro diciendo paridas, el problema es la gente que los sigue. Y claro, cuando esto afecta como tú bien dices a todos los aspectos de nuestra vida, incluyendo nuestro pequeño refugio para evadirnos de la triste realidad (oséase, los videojuegos) pues ya uno se encabrona y quiere mandar a tomar por culo todo.
Yo me desligo de todo esto, no quiero entrar en ese juego y aplaudo que la gente piense por sí misma y no se deje llevar por todo este conflicto perpetuo en el que vivimos. Muchísimas gracias Emilio por dejarme tu opinión. Un abrazo, crack.